miércoles, 19 de enero de 2011

El Joven Viejo Profesor


Hoy nuestro país está de aniversario, se cumplen 25 años del fallecimiento de Don Enrique Tierno Galván, Alcalde de Madrid, fundador del PSP, Catedrático en Salamanca, de la que fue expulsado por el régimen fascista de Franco por su oposición. Debemos recordar que también participó en la Junta Democrática.

Fue un símbolo, ya en su época de lo que sería la Transición Española. Conocido como el viejo profesor, nunca por sus ideas, fueron famosos sus bandos, por el lenguaje empleado, su sabiduría, la defensa de la cultura, de la Movida madrileña de los 80, su encuentro con el Papá al que recibió hablándole en latín. Destaca de su labor como alcalde la participación ciudadana en los plenos y su defensa del municipalismo.

Su entierro mostró el afecto que el pueblo de Madrid tenía, por el más carismático y excepcional alcalde que ha tenido en este período democrático. Respetado por sus oponentes e idolatrado por sus partidarios, fue un hombre comprometido con la Democracia y con el Socialismo, tal y como él lo entendía, para ello no dudó en incorporarse al PSOE.

Con la perspectiva que dan 25 años, debiéramos preguntarnos qué solución buscamos al municipalismo y qué papel han de desempeñar los municipios en el servicio a los ciudadanos así como la financiación de los mismos. También debemos preguntarnos cómo ha cambiado el socialismo en general y el madrileño en particular, cómo han cambiado los alcaldes de Madrid, cómo ha cambiado Madrid y si el Madrid y la España en la que vivimos son los que esperaba el Viejo Profesor.

4 comentarios:

Unknown dijo...

si el viejo profesor levantara la cabeza se volvia a morir, con solo una mirada a la politica actual o a los medios de comunicacion. ya no queda politicos asi por desgracia

Pelayo García dijo...

Mientras nuestra sociedad siga premiando la mediocridad y la ineptitud, la seguiremos destruyendo poco a poco.

Hoy en día los valores ensalzados son los del dinero fácil, rápido y sin esfuerzo, se reclaman derechos, pero no se adquieren compromisos con los deberes.

Los políticos, al igual que la sociedad se están mediocrizando y también premian a los ineptos, no voy a dar nombres para no herir sensibilidades, pero haberl@s hayl@s y quizás demasiad@s. Me niego a creer que los partidos no tengan a personas formadas, comprometidas y con dos dedos de frente. Claro se me olvidaba que a estas personas se les silencia y castiga.

Como dice la sabiduría popular, para arreglarlo tendrían que volver a parirlos. Sólo una regeneración profunda en todos los partidos y en sus direcciones, puede establecer una luz al final del camino, si no nos abocaremos al desastre.

Unknown dijo...

El problema nace de esto es la DEMOCRACIA DE LOS PARTIDOS y no es la democracia de las PERSONAS.

El parlamento es un parlamento de PARTIDOS, no es el PARLAMENTO DE LAS PERSONAS.

¿Os habéis preguntado porque solo son los partidos los que monopolizan la soberanía nacional cuando nadie, o casi nadie es miembro de un partido, y si en cambio participa diariamente en la sociedad a través de organizaciones que articulan la vida social mucho mas que lo que lo hacen los partidos???

Un saludo.

Pelayo García dijo...

y ¿Por qué no cambiar los partidos? ¿Cómo? Al final si alguien trata de cambiarlos ¿Lo expulsan? Sigue siendo vigente el : Quien se mueva no sale en la foto.

Quizás la solución sería socializar los partidos, tarea difícil, pero no imposible.