miércoles, 20 de octubre de 2010

Cambios de Gobierno

El día ha llegado, el Presidente del gobierno ha remodelado su ejecutivo y ha reducido Ministerios, siguiendo la reiterada petición de los grupos políticos. Muchos pensarán que más vale tarde que nunca y para otros el cambio se habrá quedado corto, habrá opiniones para todos los gustos. En principio, los cambios reforzarán la posición política y traerán nuevos aires al Ejecutivo.
 En primer lugar el Ministro esperado: Valeriano Gómez, que había dimitido como secretario de empleo en 2006 y fue colaborador de RNE, se manifestó en su día en contra de

la reforma laboral del gobierno, es muy bien visto por los sindicatos. Quizás es la herramienta necesaria para la reconciliación oficial.

Trinidad Jiménez cambia Sanidad por Exteriores tras una buena gestión, reconocida por los Consejeros de casi todas las Autonomías, aunque haya sido más comentada por su derrota en las primarias de Madrid, ante el candidato no oficialista Tomás Gómez.

Ramón Jáuregui Ministro de la Presidencia, veterano socialista, famoso por su posicionamiento contra las tesis abortistas, regresa a la primera línea de la política nacional desde el Parlamento Europeo, gran orador y con reconocimiento dentro y fuera del partido.

Se despiden Miguel Ángel Moratinos y Mª Teresa Fernández de la Vega, un brillante Diplomático y la segunda un auténtico animal político, dedicación, constancia, autoridad y rigor en su trabajo, se va como la primera Vicepresidenta Primera de un Gobierno de España. Esperemos que acepte su sitio en el Consejo de Estado.

Aído y Corredor son víctimas de la virulencia verbal y política de la oposición y dejan dos Ministerios que tenían gran interés político, pero escasos medios económicos.

Aprovecha el Presidente para nombrar a un político intachable Marcelino Iglesias, Secretario de Organización del Partido Socialista, ya en retirada, tras anunciar su intención de no repetir como cabeza de lista en Aragón. Sustituye a Leire Pajín que ocupará el Ministerio de Sanidad.

He dejado para los últimos a los dos nombramientos que serán más comentados Alfredo Pérez Rubalcaba y Rosa Aguilar.

El primero, azote de la oposición, firme en sus convicciones, excelente ministro del Interior, por ello continuará al frente de la lucha antiterrorista del gobierno. Querido por muchos y odiado por muchos otros, que llegan a hablar de él como el Rasputín Español, si duda un día triste para el Partido Popular, ya que Rubalcaba es un político fuerte y aumenta considerablemente su peso en el Ejecutivo. Algunos hablan de él como posible sustituto de Zapatero (esto será objeto de otro post)

 Y como colofón al cambio, la ex-alcaldesa de Córdoba Rosa Aguilar, de trayectoria reconocida en las filas de todos los partidos, oradora estupenda, tras su salida de la Alcaldía de Córdoba para incorporarse al gobierno de Griñán, fue castigada verbalmente por muchos de sus ex-compañeros, injusta crítica, porque si dentro de IU era un ejemplo a seguir e incluso se le propuso como sustituta de Llamazares, donde quiera que vaya esta Señora seguirá siendo ejemplar. Desde mi punto de vista, este ha sido el mejor fichaje que ha hecho el Presidente hoy.

Esperemos que esta remodelación sirva para mejorar la imagen del Ejecutivo dentro y fuera de nuestras fronteras, como una medida más ante la solicitud de confianza por parte de los ciudadanos y los mercados.

Señorías: ¡Gestionen bien, sean honrados, trabajen por el bien común y acaben con la crisis!

2 comentarios:

Noelia dijo...

Aído y Corredor hace tiempo que se tenían que haber ido, porque aún no entiendo para qué había esos ministerios, que con una dirección general iban en balde.
No entiendo porque se va De la Vega. En tertulias escuché que igual la van a preparar como candidata, de lo que me alegraría, porque (junto con Rubalcaba) para mi eran los mejores...

Pelayo García dijo...

Bueno acabo de leer que un micrófono indiscreto captó una conversación entre Arenas y Cospedal en la que reconocían que el nuevo gobierno era mejor, ¡¡Ver para creer!!

Podrán ser mejores o peores, lo cierto es que ha pillado tanto a propios como extraños con el pie cambiado, a penas ha habido reacciones(salvo la del emocionado Moratinos).

Quizás una recomendación sería que otros partidos hiciesen remodelaciones en sus responsables de las distintas áreas para ofrecer credibilidad y recuperar la confianza de los ciudadanos, que según las encuestas, está por los suelos.