Marcha Negra en Madrid: Tod@S con l@s miner@s

En la oscuridad del túnel de la crisis, un grupo de luces iluminan la desolación de la ciudadanía, se convierten en faro y guía, con paso firme, sereno y decidido, caminantes que llegan a su destino. Mineros que una vez más pretenden ser punta de lanza y mecha de un despertar de la adormecida, acomodada y atónita ciudadanía, que soporta estoicamente una tras otra las bofetadas de un sistema enfermo y corrupto, que nos conduce nuevamente al abismo.

 Las luces marchan por la capital española acompañadas de una multitud, que ha tenido en la lucha de estos hombres y mujeres, el punto de solidaridad con una causa que consideran justa y que justa es. No piden lujos, privilegios, desorbitados sueldos, subidas salariales, mejora de las condiciones de trabajo, ni tan siquiera reclaman fondos mineros. Sólo están pidiendo que se cumpla un compromiso adquirido y firmado para este 2012, que no se reduzcan los presupuestos para seguridad en las minas un 60% o para la formación y las ayudas en cuestión que reclaman son a la explotación, por ello, y aunque en un muy segundo y calculado plano, los empresarios del carbón respaldan la movilización minera.

 El desgobierno de Mariano Rajoy y el PP con la aprobación de los recortes a la explotación está abocando al cierre a muchas empresas mineras, que sin esa ayuda no son competitivas, con otros explotadores de otros países, que aportan al sistema carbón de peor calidad. Pretende el PP (a nivel nacional, los alcaldes populares saben que se juegan el futuro de sus municipios) el cierre inmediato de las minas, aún a sabiendas de que la fecha límite establecida por Europa era 2018.

El sordo ministro de Industria y su desaparecido y silencioso Presidente están forzando la situación hasta el punto de convertir la protesta y reivindicación de los mineros en un problema de seguridad ciudadana y orden público. Saben que eso justificaría su posición y por ello no dudan en lanzar contra los manifestantes a la policía, dejando que la violencia se apodere de la situación. Saben también que los mineros no tendrán problema en responder, porque su coraje y convicción en lo que piden les conduce a llegar hasta las últimas consecuencias para hacerse oír.

 Hoy Madrid es testigo de la solidaridad ciudadana con los mineros, sus familias y con las comarcas mineras. Porque la ciudadanía sabe que hoy por hoy sin las minas, las cuencas mineras están muertas y sus habitantes abocados a la emigración o al paro. Todo lo contrario a la posición alejada de la realidad de un gobierno zombie intervenido que se está dedicando a crear problemas en lugar de a resolverlos.

 El carbón, junto con otras energías como las renovables, son las únicas fuentes que disponemos en España. En otros países europeos se han encargo de recoger dentro del Mix Energético al sector del carbón, aún cuando disponen de otras fuentes de energía más rentables, pero no han renunciado al carbón. Estos días se habla de la posibilidad de que Alemania se replantee relanzar las explotaciones mineras, mientras en España una vez más nuestro gobierno toma el camino contrario.

 También los “mercenarios” que hoy nos empeñamos en llamar “mercados” se están encargando de sacar beneficio de la situación del carbón, así conocemos como Goldman Sachs atesora carbón colombiano en Asturias. Y es que siempre acabamos en el mismo lugar y con los mismos protagonistas, ¿A quién beneficiará el cierre de las minas ahora? ¿A quién le beneficiará en el futuro? La respuesta a estas dos preguntas nos llevará al origen del problema.

 La máxima de la política y de quienes creemos en ella es el diálogo y cuando este falla, continuar con el diálogo, y este gobierno con su Ministro de Industria y su Presidente a la cabeza, están demostrando que no tienen la altura política suficiente para afrontar un problema, creado por ellos mismos y de fácil solución. Plantéense cuánto se han gastado en la movilización, traslado y dietas de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, plantéense cuánto han costado las reparaciones de vías, los destrozos del mobiliario urbano, plantéense cuánto han costado los retrasos en los transportes de mercancías y viajeros, cuánto ha descendido el consumo en las comarcas mineras, súmenlo todo y se darán cuenta que de seguir el conflicto, habrá sido superior el coste de la protesta que el inicialmente reclamado por los mineros. Sensatez señores sensatez.

 Los mineros, sus familias, sus vecinos, las comarcas mineras, las comarcas limítrofes, las comunidades autónomas, tod@s estamos junt@s, porque es una causa justa y porque sólo piden el cumplimiento de un acuerdo firmado. Ánimo mineros no estáis solos.